Peña Sevillista La Giralda: Grave Tropiezo

Ficha encuentro

Sevilla FC 0-2 Racing Club

EL SEVILLA NUNCA PUDO CON EL ORDEN DEL RACING

El Racing se impuso bien a balón parado. El Sevilla nunca supo hincarles el diente a los cántabros. Las ganas de la segunda parte fueron insuficientes, ante un rival muy ordenado

No fue el domingo del Sevilla, ni mucho menos. Los nervionenses buscaron el gol, sobre todo en una segunda parte en la que incluso disfrutaron de buenas ocasiones, pero nunca dieron la sensación de poder quitarle el choque a un Racing muy ordenado a lo largo de todo el choque. El Sevilla acabó atacando al arrebato, sin orden y con un estéril ímpetu que siempre chocó con el concierto del rival. La figura de Nicola Zigic finalmente resultó decisiva y los santanderinos se llevaron los tres puntos haciendo bueno su potencial a balón parado. Jiménez llegó a alinear hasta a cuatro delanteros en el campo, produciéndose el debut de Pukki, pero ni con toda la artillería disponible Toño acabaría recogiendo el cuero del fondo de las mallas, porque la lucidez de los atacantes hispalenses apenas brilló.

Al Sevilla le está costando sacar adelante sus encuentros de casa, eso no es un secreto. Contra el Racing los nervionenses de nuevo se vieron incapaces en los primeros minutos de crear peligro. Tenían el cuero, sí, pero el muro cántabro resultaba inabordable por más que incluso Escudé y Squillaci dieran un paso adelante para convertirse prácticamente en medioentros. El dibujo planteado por Jiménez, con Adriano en la derecha y Capel en la izquierda, en cambio, sí daba resultados en las contras. Las salidas de Capel desconcertaban a los visitantes y de hecho Álvarez Izquierdo le perdonaba la expulsión a Varela, siendo muy hábil Muñiz Fernández, que sustituyó al ex colchonero acto seguido para evitar quedarse con diez.

El partido estaba parado pero al menos era el Sevilla quien tenía la bola. Sin embargo la situación comenzó a torcerse cuando en el minuto 23 una falta botada por Munitis, acabó en cabezazo de Zigic que sacó Palop con un manoplazo, y acabó remachando César Navas a placer. Con el 0-1 el Sevilla se vino abajo, aunque todo pareció reactivarse cuando Serrano se iba a la caseta por cazar por detrás a Adriano en una contra. La expulsión daba aire a la parroquia hispalense, cierta esperanza para revertir la situación al descanso, pero ni siquiera dio tiempo a meter presión en la reanudación, porque en otra jugada a balón parado Zigic hacía el definitivo 0-2.

El Sevilla, que ya jugaba con tres delanteros, pues Chevantón había sustituido a Escudé, se fue arriba a buscar la heroica, pero desesperó muy rápido y en poco tiempo cambió el toque por los balones a la olla, donde el Racing siempre le ganó la partida. Luis Fabiano y Kanouté, para colmo, no estaban finos. El malí erraba en los pases y el paulista no acertaba en los remates, que se le iban altos en exceso. Con la entrada de Pukki por Drago Jiménez se jugaba el todo por el todo. El finlandés la tuvo en un uno contra uno ante Toño, que le ganó la partida. Quizás ahí estuvo el choque, porque con el campo volcado, un gol con aproximadamente 15 minutos por delante podía haber supuesto un punto de inflexión. Pero ésta no era la noche del Sevilla, pues de hecho siempre traslució del choque que los nervionenses podían estar atacando cinco horas que no iban a lograr batir a los cántabros, ya que luchaban sin chispa, con muy poca frescura mental.

No se le puede reprochar nada en actitud a los hispalenses, que lo dejaron todo sobre el campo. La realidad es que el Racing hizo bueno su potente poderío a balón parado y a los locales, sobre todo el 0-2 les pesó demasiado, quizás haciendo mella el cansancio por la acumulación de partidos, porque hubo momentos en los que se vio a determinados jugadores con los plomillos fundidos. En cualquier caso, el equipo sigue arriba, tercero, con el quinto a cuatro puntos... Es una derrota dolorosa, por como se produjo la jornada, pero el fútbol no da tiempo a recrearse ni en tropiezos ni en triunfos. El jueves llega el Valencia y la situación requiere un juego más fluido para llegar a semifinales.